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Las enfermeras María Soto y Ana Bueno realizan esta actividad de salud comunitaria para que los pacientes que toman el Sintrom aprendan a manejar la medicación y resuelvan sus dudas sobre alimentación y el fármaco
Con el objetivo de que los pacientes que toman el Sintrom u otros fármacos similares que hacen que su sangre sea más fluida para prevenir trombos y que el corazón les funcione mejor las enfermeras María Soto y Ana Bueno del centro de salud Santa Faz Ayuntamiento han realizado un taller de TAO (Tratamiento de Anticoagulantes Orales) con el sugestivo lema de “Paciente anticoagulado, pero no olvidado”.
Así, el Sintrom es un fármaco que trata de prevenir la formación de coágulos en pacientes de alto riesgo y lo toman alrededor de 700.000 personas de nuestro país, según los datos de la Sociedad Española de Cardiología. En el Centro de Salud Santa Faz-Ayuntamiento, alrededor de 70 personas son tratadas con este anticoagulante tanto en el centro como en sus domicilios. “Estamos muy contentos con la repercusión del taller ya que han acudido un 40% de los pacientes que tenemos dentro de este programa de salud», señala la coordinadora de enfermería del centro, Ester Santoro.
“Ya realizábamos esta actividad de salud comunitaria antes de la pandemia, pero la hemos retomado ahora para dar un apoyo a los pacientes anticoagulados y resolver sus dudas”, señala Santoro, “Es un taller muy demandado, ya que cuando empiezan a tomar los anticoagulantes, a los pacientes les surgen muchas dudas”, añade.
Así, por ejemplo, existe la falsa creencia de que no pueden tomar verduras y hortalizas de hoja verde, como las acelgas, las espinacas o las lechugas, pero no es así. “Lo importante es mantener un consumo estable para evitar la fluctuación de los niveles de vitamina K, que influyen en la coagulación”, explica la enfermera María Soto.
También se les ha recordado a los asistentes que deben realizar sus controles periódicamente, tal y como les indica el hematólogo. Así, a primera hora suelen acudir al centro de salud y el personal de enfermería les toma una muestra de sangre en el dedo. Luego se envía al hospital y a las pocas horas está el resultado, que pueden recoger presencialmente o se les manda un correo electrónico en el que se les indica cuál es su pauta de medicación, cuántas pastillas deben tomar durante los siguientes días. “Algunos pacientes, por ejemplo, han venido preocupados porque un día se les ha olvidado tomar su dosis de anticoagulante, pero les explicamos que tampoco es algo tan grave, pero eso sí, deben anotarlo para que el médico sepa cómo les tiene que ajustar las dosis siguientes”, señala la coordinadora de Enfermería del Centro de Salud Santa Faz.
Otro asunto fundamental que se les comenta a los anticoagulados es que cuando deben ser sometidos a una intervención quirúrgica deben avisar con tiempo, ya que se les debe suspender el anticoagulante para evitar riesgos de hemorragia durante la operación. Durante un tiempo se les sustituye el Sintrom por inyecciones de heparina. “Es muy importante que los pacientes nos comuniquen, con suficiente tiempo de antelación, cualquier tipo de intervención, ya sea una extracción dental o una prueba invasiva, y también deben informarnos del olvido o duplicación de cualquier toma y los sangrados que puedan aparecer ya que de este modo se lo podemos comunicar al hematólogo para que ajuste la pauta”, recalca la enfermera Ana Bueno.
Y siguiendo con sus actividades de salud comunitaria, cada viernes los pacientes que lo deseen pueden sumarse a “Santa Faz en Marcha”. Parten a las 10 de la mañana de la puerta del centro de salud y caminan unos 3 kilómetros hasta la próxima playa del Postiguet con el objetivo de fomentar el ejercicio físico y la socialización de sus usuarios.
